Aunque envejecer, en muchas ocasiones, depende de los genes, unos buenos hábitos son especialmente efectivos para llegar y mantenerse en la tercera edad para mayor comodidad. Os damos algunos consejos para ello:
La alimentación mediterránea
La alimentación es fundamental en la tercera edad. Un estudio de la Unión Europea confirmó que la dieta mediterránea, compuesta de pescados, fruta fresca, vegetales y aceite de oliva, disminuye de manera significativa los procesos inflamatorios en el cuerpo que están vinculados al envejecimiento. También reduce el riesgo de perder masa ósea y padecer osteoporosis.
Otra ventaja es que incluye ácidos grasos omega 3 que es esencial para para frenar el deterioro del cerebro. Las proteínas también son esenciales para mantener firmes y saludables los músculos. ¿Todas estas ventajas y sólo por comer bien? Sí. Es nuestra dieta.
Menos azúcar
Aunque su uso está más que extendido, el consumo excesivo de azúcar puede ser perjudicial cuando nos hacemos mayores puesto que produce inflamaciones en el cuerpo y es caldo de cultivo para las enfermedades cardiovasculares.
Además, influye para que las personas luzcan más viejas de lo que son. Esto se observó en un estudio del Centro Médico de la Universidad de Leiden, en Holanda, en el que se midieron los niveles de azúcar de más de 600 personas.
En el siguiente blog te mostramos que otros hábitos ayudaran a que no envejezcas prematuramente.